mujer-llorando

Diario de ella.

El sábado en la noche él estaba raro, habíamos quedado de juntarnos a las 9 en el restaurant, me atrasé, pensé que su cara y molestia se debía a mi retraso.

La conversación no fue muy animada, estaba ausente, le pregunte pero me dijo que no tenía nada que ver conmigo.

En el auto le dije que lo quería mucho, el solo pasó su mano por mis hombros.

Llegamos a la casa, pensé que quería dejarme quizás tendría otra y no sabía como decírmelo.

Encendió la televisión, como haciéndome ver que todo había terminado entre nosotros.

Nos fuimos a la cama y para mi sorpresa respondió a mis caricias e hicimos el amor. Luego quise afrontar la situación, hablar con él pero se quedo dormido.

Me puse a llorar y seguí llorando hasta quedarme dormida. Ya no se qué hacer estoy segura que sus pensamientos están con otra.

Diario de Él.

Perdió Boca.

Al menos me eche un polvo.

[wp-bannerize group=’home2′]

Mujeres cuantas veces nos ha ocurrido alguna situación parecida, nos pasamos preocupadas de las reacciones y del comportamiento de nuestras parejas.

Sufrimos, nuestra inseguridades salen a flor de piel, y solo por no preguntar o quizás por el efecto contrario el querer siempre saberlo todo y preguntar todo.

Los hombres y mujeres respondemos de manera distinta a muchas cosas, nosotras somos tremendamente emocionales y ellos muy prácticos, por esto mismo debemos aprender a enfrentar situaciones y no querer tener siempre el control de la relación y el querer entender todo.

¿Valía tanto la pena todos los pensamientos de ella ante el comportamiento de él, pensar incluso que la relación ya estaba llegando a su término? Y para el solo había sido un mal día ya que su equipo del alma había perdido.

Tenemos que creer en nuestras capacidades y confiar en la relación que tenemos, y no que se nos vaya la vida pensando o haciendo las cosas para el otro, tener más seguridad y confianza en nosotras mismas.

Si nuestra pareja tiene un mal día o una mala cara, o simplemente no tiene ganas de conversar ,el mundo no se acaba, tenemos mil cosas entretenidas que hacer nosotros solas, salir, leer, ver una película, sentir el aire, relajarnos,  y respetar ese espacio que nuestra pareja necesita, el tiempo siempre es nuestro mejor aliado y sin darnos cuenta, él estará de vuelta sin que estemos paralizadas a la espera de una explicación o  preguntando qué te pasa.

Confiemos en nosotras, ya no somos las mujeres de antes, tenemos el mundo a nuestros pies, hemos demostrado que somos capaces de trabajar, ser madres, cumplir nuestros sueños, sentirnos lindas, decir y pedir lo que nos gusta. Manejar nuestra sexualidad de manera responsable y complaciente para nosotras mismas, que un silencio de nuestra pareja no va a venir a echar abajo lo que tanto nos ha costado lograr.

[wp-bannerize group=’home3′]

Somos el sexo fuerte, por lo tanto mayor confianza y que esta pequeña historia nos haga reflexionar que tanto rollo solo nos hace perder nuestra autoestima y crear mayor inseguridad y miedo. Nunca tomemos decisiones con miedo ya que estas serán los peores errores.  Dejemos nuestra mente tranquila, no todo es el fin del mundo, confiemos en nosotras, nuestras capacidades, nuestro cuerpo, inteligencia, seducción, sentirnos importantes, lindas, grandes, encantadoras.

A veces el silencio dice más que mil palabras, somos tremendamente potentes, dejemos al nuestro hombre sufrir porque su equipo perdió, y salgamos a vivir la vida, tenemos muchas cosas entretenidas en que pensar.

Y a la vuelta seremos unas diosas lista para hacerlo disfrutar.

NO MÁS ROLLOS.

IMG-20121209-WA000Francisca Buzeta Abt.
@panchabuzeta
[email protected]