You are currently viewing Cambio de ciudad, cambio de vida: sé quien soy

Siempre busqué la independencia, siempre quise que las cosas me costaran, que las cosas tuvieran esfuerzo de cara a la realidad de la vida y no digo que todo se me haya dado en bandeja, por el contrario, vengo de una familia de esfuerzo y dedicación, pero siempre quise vivir mi propia vida y entonces, me cambié de ciudad.

Mis padres siempre supieron que después de que saliera de la universidad iba a tomar mis cosas y me iba a ir por ahí. Para el resto sonaba un poco aventurero y mal visto, porque podía notar que pensaban que yo era la “loquita” de la familia o “la rebelde” y hasta “mal agradecida”. Pero todo se dio natural y sin ansiarlo de inmediato.

Encontré el amor en otra región, Valparaíso me envolvió y mi pareja lo complementó. Siempre me vi ahí, aún antes que lo conociera, aunque él crea lo contrario. Y así sin más, me fui de la casa antes de mi titulación, sin nada, no le pregunté a nadie, pero con el apoyo de todos y eso fue lo primordial. Nadie me juzgó y nadie me detuvo. Lo fabuloso de todo es descubrirse, en poco tiempo pude saber quién soy en menos tiempo que toda mi vida hasta ahora. He puesto a prueba mi tolerancia, mi paciencia y he conocido cuanto puedo amar. Me alucinó la idea de comenzar una vida desde cero y busqué un trabajo, arrendé una casa, compré lo básico y me instalé en mi nueva ciudad. Es maravilloso.

Me gusta que las cosas cuesten, que cueste levantarse, que cueste ir a la feria o que sea una lata llegar a lavar la loza después de la pega, pero encontré lo que buscaba. Comenzar una nueva vida fuera del alero de los papás es reconfortante, y así como otros se sienten realizados con viajes o con reconocimientos profesionales, yo me siento realizada descubriendo mi propio mundo, mi cabeza y mi entorno, haciendo amistad con mi vecina 60 años mayor y regando las plantitas, es mi inspiración.

Por: Darlyn Jara @darjaral