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Hay muchas formas distintas que se pueden emplear para tener una crianza respetuosa, pero si se te hace difícil llevar esto a cabo no te preocupes porque nadie nació entendiendo cómo criar. No hay manuales especiales universales que expliquen cómo la crianza respetuosa debe ser, pero con un poco de paciencia y amor todo se puede lograr.

Crianza respetuosa
Imagen: Pinterest.

Crianza respetuosa: ¿cómo lograrlo?

Hay muchas formas de tener una crianza respetuosa pero para que puedas salir rápido de apuros, estos 5 puntos serán claves al momento de criar a tu pequeño. Lo más importante que debes tener en cuenta es que nunca deberás sobrepasarte con tu tono de voz ni tus acciones, recuerda que tú eres el adulto y eres el modelo a seguir del pequeño.

1. Nunca uses los golpes

Más que los golpes, el simple hecho de hacerle daño a alguien más pequeño e indefenso que uno es muy doloroso, no para el adulto sino que para el niño. Enseñar con violencia solo muestra que uno aprueba esta conducta maliciosa y estará enseñando que la violencia es aceptable. Cuando uno es padre es referente de un camino a seguir, los pequeños idolatran e imitan todo lo que hacen los mayores. Por eso si uno enseña con dolor, el niño lo aprenderá con dolor y pensará que está correcto. 


2. Las estrategias evitantes deben ser suprimidas

Ignorar por completo sus emociones o proporcionar castigos como la ley del hielo, solo harán que todo empeore. Cuando uno no escucha lo que en verdad quieren decir y se omiten sus pedidos o lágrimas, genera desconfianza en el niño. Lo mejor es evitar esas acciones porque sino los niños terminarán pensando que sus emociones y demandas no son importantes.


3. El cariño no es un premio

No porque haga algo bien siempre debes darle un premio como una golosina o una ida a la plaza, el pequeño debe entender que sin importar cómo se comporte el amor de un padre no tiene medidas.


4. Usa el diálogo y no el castigo

En vez de castigarlo por sus acciones deberías hablar con el porque “eso no se hace, estás catigado” no suena mejor que “a ver, dime que pasó y por qué lo hiciste”. Tómate el tiempo de escuchar sus razones y además explícale el por qué lo que hizo está mal. Es muy importante que le entregues esta instancia porque le estarás mostrando que sí importa lo que el sienta.


5. Dile siempre que no importa lo que pase, siempre lo amarás

Independiente de la gravedad del asunto, nunca pero nunca dejes que se salga de las manos: debes mostrarle que aunque lo regañes, estarás para él cuando te necesite.

Por: Catalina Grez M.