Antes de formar parte de la familia real, Kate Middleton era solo una persona normal que trataba de encontrar la forma de ganar dinero con su título de historia del arte. Después de que Kate se graduó de St. Andrews en 2005, tuvo dos trabajos normales antes de la planificación de la boda real y, más tarde, el compromiso real se convirtió en su vida.
Primero, trabajó para el negocio de su familia, Party Pieces, que vende artículos para fiestas. Tener un negocio familiar para trabajar es un cierto tipo de privilegio, pero el trabajo era, sin duda, más normal que ser parte de la realeza.
Después, Kate tomó un trabajo a tiempo parcial como comprador de accesorios con el minorista británico Jigsaw, según Daily Mail. “Comprador de accesorios” puede sonar como un título impresionante, pero en realidad, Kate, al igual que muchos trabajadores jóvenes de nivel básico, trabajaba más o menos como asistente personal. Sus tareas laborales incluían deberes como hacer recados y llevar té y bocadillos a los modelos en el set de sesiones fotográficas.
Belle Robinson, co-fundadora de la marca con John Robinson, compartió sobre la ética de trabajo de Kate y la compostura ya como si fuera realeza durante una entrevista en 2008 con Evening Standard. Kate, que ya estaba saliendo con el Príncipe William en ese momento, tenía que equilibrar el trabajo normal con ser rodeada de paparazzis.
“Debo decir que me impresionó mucho”, dijo. “Hubo días en que había equipos de televisión al final del día. Decíamos: ‘Escucha, ¿quieres salir por la puerta de atrás?’ Y ella decía: “Para ser honesta, nos van a perseguir hasta que se hagan una idea de todo. Entonces, ¿por qué no voy, acabo la película y luego nos dejan en paz?“. Agregó: “Pensé que era muy madura para una joven de 26 años, y creo que ha sido bastante buena para no cortejar a la prensa“, dijo. “No creo que yo hubiera sido tan educada”.
Kate, trabajó en Jigsaw hasta noviembre de 2007, pero no permitió que su condición de realeza cambiara su actitud. Ella era amistosa con todos los otros ‘plebeyos’ que no estaban saliendo con la realeza. “Se sentó en la cocina a la hora del almuerzo y conversó con todo el mundo, desde los conductores de la camioneta hasta las chicas de las cuentas“, dijo Belle. “Ella no era pretenciosa“.
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