Esa falta de confianza y seguridad se ve cimentada, básicamente, en los defectos que nosotras mismas anteponemos; sin embargo, según una encuesta publicada en el International Journal of Sexual Health, muchos de ellos no llegan a percibir ni esperan a su “mujer perfecta”
Los signos del tiempo son un claro ejemplo de lo que nos hace sentir que ya no se tienen muchas oportunidades en el amor o que estamos lejos de ser esa “mujer perfecta”. Las arrugas o las canas son la preocupación de muchas a la hora de conseguir pareja.
No obstante, para muchos hombres estos detalles del tiempo son sumamente intrigantes y atractivos. El pelo entrecano o las líneas de expresión dan lugar a una mujer auténtica que ha disfrutado de su vida y de su cuerpo, la madurez puede ser un fuerte detonante sexual, según revelan muchos de los encuestados.
Mientras que para la mayoría de nosotras los kilitos de más pueden ser deprimentes porque nos hacen sentir poco sensuales, para ellos en gran medida son objeto de deseo.
Varios estudios anteriores revelan que las curvas son las preferidas de los hombres, sobre todo si son de una mujer que sabe llevar su cuerpo, lo que demuestra que es todo una cuestión de actitud. Lo que se tiene hay que aprender a lucirlo con orgullo.
Las manchas de nacimiento, las pecas o los lunares son para nosotras algo a esconder, cuando en realidad pueden convertirse perfectamente en un arma de seducción infalible.
A ellos les encantan las características personales en una mujer, señas de identidad que solamente se encuentran en una, por lo que prefieren que las mostremos de manera natural y sensual, en lugar de cubrirlas con kilos de maquillaje.
Fuente: yahoo.es
