You are currently viewing 15 señales que estás exactamente donde se supone debes estar

1.-No eres feliz todo el tiempo

No estás viviendo un estilo de vida feliz y despreocupado. A veces estás abrumada por la alegría, y otras tienes un muy mal día, semana o mes. Estás viviendo una vida normal y realista. Entiendes que está bien no ser feliz cada segundo de cada día.

2.-Muchas veces te sientes incómoda

Estás fuera de tu zona de confort la mayor parte del tiempo. Y aunque puede ser difícil, esto implica que te estás obligando a crecer y probar cosas nuevas. La gente rara vez encuentra el éxito en su propio patio. Por el contrario lo consiguen cuando están dispuestos a sentirse incómodos y asustados y eso es exactamente lo que estás haciendo: te estás permitiendo sentirte incómoda.

3.-Te encuentras pensando en el futuro y en cómo “todo esto valdrá la pena”

Tu mente no se centra solo en divertirse en el presente. En cambio, te has dado cuenta de que si quieres que las cosas valgan la pena más adelante, tienes que trabajar ahora.

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4.-Te preocupa más cómo te sientes en lugar de como te ves

Probablemente todavía te importe un poco, pero en su mayor parte, estás mucho más enfocada en encontrar cosas y gente que te haga feliz. Ya no te molestas con esas personas superficiales porque, como dijo Eleanor Roosevelt Joseph del Diario de una Princesa, “Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento”.

5.-El rechazo ya no es algo a lo que le tienes miedo

vencer tus miedos

Es incómodo, no te gusta y harás todo lo posible para evitarlo. Pero sabes cómo lidiar con él, y te niegas a permitir que éste te paralice. Has hecho lo suficiente y has probado bastantes cosas nuevas que te han expuesto al rechazo, lo que en realidad solo te ayudó a convertirte en la persona que quieres ser.

6.-Tiene una visión realista del éxito y comprendes que se necesita tiempo y esfuerzo

Las personas que piensan que el éxito es instantáneo suelen ser quienes menos exitosas son. Te das cuenta de que la razón por la que no todos tienen éxito es porque no todos están dispuestos a estar en el lado no tan glamoroso de éste en un principio.

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7.-Tus relaciones se basan en quien le agrega algo a tu vida, en lugar de en quién crees deberían rodearte

Ya no tienes tiempo para las jerarquías sociales y las amistades políticamente correctas. Ahora eres una adulta y tu tiempo libre es mucho más limitado, por lo que en este momento de tu vida pasas tu tiempo con las personas que te hacen feliz y cortas el cordón con aquellas que te deprimen.

8.-Tu idea de diversión es diferente 

Salir y socializar sigue siendo divertido, y tener una noche de locura de vez en cuando puede ser entretenido. Pero en su mayor parte, la pasas mucho mejor cuando realmente puedes hablar con la gente y tener conversaciones interesantes e ilustrativas, en lugar de tratar de gritarle a un extraño en un club ruidoso y sudoroso.

9.-Estás haciendo cosas que no quieres hacer porque sabes que son necesarias

No te gusta despertarte al amanecer, salir de tu cama caliente y pasar de nueve a diez horas al día (o más) trabajando, pero lo haces de todos modos porque sabes que es importante usar tus talentos de una forma u otra. Tal vez estás poniendo mucha energía en hacer ejercicio, comer sano o practicar tu pasión, sea cual sea. Aunque sea difícil, entiendes que el trabajo duro es necesario si quieres tener un poco de control sobre la dirección en la que va tu vida.

10.-Aún luchas con la inseguridad y la incertidumbre

No eres perfecta, y todavía hay muchos días en los que sientes que no eres tú misma. Tienes que superar los sentimientos de inadecuación y dudas, pero sabes que esto es peor de lo que parece pues estás consciente que te estás poniendo en situaciones que te desafían y te obligan a crecer para convertirte así en una mejor versión de ti misma.

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11.-Es difícil que te sientas mal por las personas que no están haciendo nada para ayudarse a sí mismas

Todos tienen que enfrentar obstáculos, y entiendes que a pesar de que has pasado por dificultades y trabajo duro, también ha habido mucha gente que te ha ayudado a llegar a donde estás hoy. Pero al mismo tiempo, si a alguien se le ha ofrecido ayuda, orientación o asistencia y lo sigue rechazando por pereza, miedo o falta de ambición, es difícil sentirse mal por ella.

12.-Sabes cuándo pedir ayuda y cuándo descifrar y solucionar el problema por ti misma

Todo el mundo necesita ayuda a veces, incluso las personas más resueltas. Tú sabes que a pesar de que ahora eres una adulta independiente, está bien pedir ayuda, apoyo o aliento cuando lo necesitas. Sin embargo, también reconoces que, a veces, solo tienes que poner cara de valiente y superar ciertas cosas por tu cuenta.

13.-No estás ganando mucho dinero, pero tienes suficiente

No tienes que cuestionar cada compra que realizas en el supermercado, pero tampoco puedes darte el lujo de salir a almorzar cada tarde del fin de semana con tus amigos. Estás viviendo un estilo de vida cómodo mientras aprendes, al mismo tiempo, a apreciar el valor del dinero.

14.-Ya no tienes necesariamente un millón de amigos

Estás comenzando a darte cuenta de que es imposible mantener amistades tan fácil y fervientemente como lo hiciste en la universidad. Ahora tienes mucho más que hacer y tus amigos están repartidos por todo el lugar. Empiezas a ver que es natural que algunas amistades se desvanezcan  mientras otras se fortalecen. En este punto, es más importante para ti tener unos pocos amigos sólidos, confiables, leales y genuinos que tener docenas de conocidos.

15.-Tu forma de ver el mundo cambia con frecuencia

Nomad Republic

Tal vez tu perspectiva general se ha mantenido igual, tal vez no. Pero de cualquier manera, tu mente ha estado abierta durante bastante tiempo y te encanta poder abrir tu mente a nuevas ideas.

Vía: Thoughtcatalogue.com
Traducción: Mujer y Punto