You are currently viewing 7 consejos sobre cómo explicarle a tu hijo la ausencia de su papá

“Está trabajando y no pudo venir, quizás otro día” es una de las tantas frases que las madres han usado para explicarle a sus hijos que lamentablemente, los padres no llegarán. Pequeños que sufren el abandono y la ausencia paterna, comienzan a elaborar preguntas que a todas pueden llegar a asustarnos como “¿acaso no me quiere mamá?”, o “¿por qué no soy importante para él?”, son algunas de las que se escuchan más a menudo. Independiente que sepamos que perdonar sana el alma, a veces nosotras no podemos bajar la guardia.

Es muy difícil incluso intentar explicarle a los hijos (sin querer lastimarlos) que su progenitor simplemente no vendrá y no estoy hablando de mentir, pero sí debes tener la suficiente inteligencia emocional para dosificar lo que le dirás.

Independiente de la situación que tanto tu hijo como tú estén viviendo, es necesario hacer un análisis que nos permita recordar lo bueno de él, lo que nos gustó cuando lo conocimos y las cualidades que percibimos. Todo el mundo tiene cosas buenas y, por muy deteriorada que pueda estar la relación entre ambos padres, es esencial que sepamos identificar dichas cualidades y transmitírselas a nuestro hijo en un acto de generosidad hacia él.

La verdad es que no soy psicóloga, pero me ha tocado vivir estas situaciones muchas veces con mis hijas y siempre he pensado que hay formas de decir las cosas. Sobre todo  si se trata de cosas que pueden sufrir a las personas que más amamos: nuestros pequeños.

Si también te ha ocurrido, creo que estos 7 consejos podrán ser útiles al momento de tener que responder ante tu hijo. Sin miedo, respira hondo y habla con la verdad.

1. Nunca hables desde la rabia o el enojo

Crianza no gritarle a tu hijo

Por más rabia que puedas tener contra él, no traerá ningún beneficio hablar con enojo, porque sólo lograrás transmitirle información con carga emocional negativa. Independiente de los problemas personales que tengas con el padre de tu hijo, ESOS SON PROBLEMAS ENTRE USTEDES DOS.
¡Tienes que aprender a separar las cosas! No olvides que aunque él no esté, el hijo es de ambos y su padre es el 50% de sus orígenes biológicos. Hablar mal de su persona sólo traerá rencor, así que cálmate y respira porque créeme que hay palabras que duelen más que las piedras.

2. Explícales que sí son importantes aunque él no se aparezca

Puede que muchas veces tu hijo no se sienta importante porque la falta de su padre puede afectarlo de distintas formas. Explícale que si bien su padre no está, tu hijo nunca fue la razón del por qué se fue. Podrías preguntarle a tu hijo “¿crees que yo podría estar un día sin pensar en ti?”


3. “No porque no te visite, significa que no le importas”

Nunca, nunca, pero nunca le digas a tu hijo que no le importa a su padre, independiente de que efectivamente sea así. Claro que a veces una se queda corta de excusas como “está trabajando”, “no tuvo tiempo” o “está muy lejos”, pero cualquiera de ellas es mejor a “no le interesas, por eso nunca más quiso verte”.

¿Imaginas el daño emocional que puedes hacerle si le hablas así? Está bien que ya estés cansada de repetir una y otra vez las mismas razones, pero créeme que son mucho mejores. Te aconsejo que cuando estén hablando de esto, intenta cambiarle el tema y proponle hacer algo divertido como ir a una plaza o al cine. Desviar la atención en los niños es algo fácil de hacer y aunque sea una omisión, estarás ayudándolo a calmar su interior.


4. Nunca le mientas, pero no cuentes todo

Las mamás no debemos mentir porque si traicionamos la confianza que nuestros hijos nos tienen, será muy difícil volver a recuperarla.

Busca la forma correcta de decirle las cosas: sin ser hiriente y calmada. No es necesario que cuentes toda la información que posees porque es sólo un niño y no puede procesar todo. No tiene por qué saber lo difícil que es salir adelante sola o lo triste que estás porque su padre no aparece.

Cuando crezca, podrá preguntarte con mayor lujo de detalles qué ocurrió exactamente y además será capaz de sacar sus propias conclusiones.


5. No generes falsas expectativas

Debes transmitir expectativas realistas, así no potenciarás la sensación de abandono porque el “tu papá no puede venir” en vez de “no quiere venir” es muy distinto. Si sabes que no va a volver o si hay pocas posibilidades de que lo haga, no le des alas de que algún día llegará a tocar la puerta.

No hay nada más triste que estar esperando algo que no sucederá y al final, la única culpable de eso serás tú.


6. Fomenta sus vínculos con la familia

Es esencial transmitirle al niño que es un ser muy querido por muchas personas, que es valioso, importante y que siempre va a estar acompañado, cuidado y amado.

Quizás su padre está ausente, pero el resto de la familia no. Planifica salidas, juntas, comidas y todo lo que se te ocurra. Lo ayudarás a tener un apoyo incondicional y se dará cuenta de que su círculo de vida es más grande y especial de lo que él pensaba.


7. No lo abrumes con información, camina lento

Respecto a cuándo hablarle de su padre, es positivo hacerlo como proceso, con naturalidad y poco a poco, según vayan surgiendo oportunidades que permitan comentar el tema. Independiente de la edad que tenga, no es necesario que le llenes la cabeza de detalles. Tienes tiempo para contarle historias sobre su padre, situaciones divertidas que algún día viviste con él y más.