¡Es hora de reevaluar tus hábitos en la ducha! Algo tan rudimentario como bañarse debería ser bastante sencillo, pero muchos de nosotros somos culpables de cometer los mismos errores cada vez que nos metemos en la ducha. Con curiosidad por saber cuáles son los errores más comunes en la ducha y ansiosos por corregir el error de nuestros métodos para una piel más saludable, Real Simple le pidió dermatólogos que nos dijeran como hacerlo correctamente.
1.-Pasar demasiado tiempo en la ducha
“Un culpable común de la piel seca y con picazón es tomar duchas largas y calientes”, dice la Dra. Shari Marchbein, dermatóloga certificada y profesora asistente clínica de dermatología en la Facultad de Medicina en NYU. “Recomiendo tomar duchas breves que no duren más de cinco minutos”. ¡Entra, límpiate y sal! Para ahorrar agua y no dañar tanto tu piel, puedes cerrar el grifo mientras dejas que el acondicionador se asiente o mientras te afeitas.
2.-Utilizar agua muy caliente
Además de pasar demasiado tiempo en la ducha, es un error común subir la temperatura y disfrutar de una ducha muy caliente y humeante. Puede sentirse bien en el momento, pero esto no augura nada bueno para tu piel. “Siempre les digo a mis clientes que los baños deben ser solo negocios, no placer”, dice la Dra. Rita Linker, dermatóloga certificada. “Las duchas calientes realmente le quitan a la piel su grasa natural y lubricante, por lo que el objetivo debe ser tomar duchas breves y tibias”.
3.- Limpiarse con productos demasiado agresivos
“Otra causa de piel seca e irritada es el uso de jabones perfumados, jabones en barra y jabones antibacterianos”, dice la Dra. Marchbein. “Mantente alejado de todo lo que tenga mucho olor y recuerde que lo suave siempre es mejor”.
4.- Frotar con una esponja vegetal
“Las esponjas vegetales son un nido para las bacterias y las infecciones y no deben usarse en la ducha. En especial, no pasarse de una persona a otra, ya que así es como he visto que las infecciones cutáneas benignas se propagan entre los miembros de la familia”, dice la Dra. Linkner.
En su lugar, opta por usar un paño limpio cada vez que te bañes, o simplemente usa tus manos con un poco de agua y jabón. Si debes usar una esponja vegetal, cámbiala cada 30 días y déjala siempre colgando para que se seque.
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5.- No cambiar las hojas de afeitar con la suficiente frecuencia
Levanta la mano si has estado usando la misma hoja de afeitar durante un tiempo como forma de ahorro. Desafortunadamente, esta es un gran NO, dice la Dra. Marchbein. “Los pelos encarnados, la foliculitis (que es la inflamación de los folículos pilosos) y la irritación de la piel pueden ocurrir cuando las hojas de afeitar se desafilan. Para obtener los mejores resultados al afeitarse, recomiendo cambiar la hoja de afeitar cada dos o tres afeitados”, dice.
6 .-Usar un limpiador sin pH equilibrado “ahí abajo”
Es importante utilizar un producto que esté formulado específicamente para los genitales externos al realizar la limpieza. El microbioma vaginal es muy sensible y los productos no equilibrados pueden alterarlo al eliminar las bacterias buenas y cambiar el nivel de pH ligeramente. Esto conduce a infecciones por hongos, picazón, ardor y olores extraños.
7.- Olvidar hidratar inmediatamente después de la ducha
La propia naturaleza de la ducha, incluso si la mantienes breve y tibia, provoca que se elimine un poco la grasa natural, lo que hace que la piel se sienta seca, con picazón y tirante. Por esa razón, la hidratación posterior a la ducha es clave para una piel sana.
“Es importante hidratar generosamente de la cabeza a los pies dentro de los 60 segundos después de salir de la ducha. Busca humectantes con ceramidas (un lípido que se encuentra naturalmente en la piel) para ayudar a reemplazar los que se eliminan en la piel seca, así como humectantes, como ácido hialurónico y glicerina”, dice la Dra. Marchbein.
Fuente:Realsimple.com
