You are currently viewing A mi hijo: Algún día serás independiente, hoy me necesitas

Algún día no dependerás de mí para todas tus necesidades, pero hoy, me necesitas.
Algún día no comerás durante 45 minutos cada dos horas, pero hoy te he alimentado con cada gota que da vida.
Algún día podrás decirme exactamente lo que necesitas, pero hoy, respondí a tus gritos con el instinto de una madre.
Algún día podrás decirle al médico dónde te duele, pero hoy, fui tu defensora.
Algún día aprenderás a dormirte solo, pero hoy te arrullé.

Algún día podrás mantener tu comida bajo control, pero hoy, cambié tu ropa cinco veces.
Algún día volverás a tu habitación solo, pero hoy te llevé.
Algún día te entretendrás, pero hoy, jugamos al escondite todo el día.
Algún día decidirás exactamente cómo te gusta el peinado, pero hoy, te peiné a mi gusto.
Algún día leerás historias por tu cuenta, pero hoy, te las leo yo a ti.

Algún día podrás bañarte solo, pero hoy, te bañé.
Algún día aprenderás a hacer tu propia comida, pero hoy hice tu comida favorita.
Algún día encontrarás a alguien más que te ame y seque tus lágrimas, pero hoy ese era mi trabajo.
Algún día enfrentarás problemas más grandes que el jugo derramado y los osos de peluche perdidos, pero hoy fue fácil resolver tus problemas.

Algún día tendrás la confianza suficiente para hacer amigos por tu cuenta, pero hoy necesitas mi ayuda.
Algún día insistirás en pelear tus propias batallas, pero hoy, llamé a la mamá del que se metió contigo.
Algún día saldrás de tu caparazón y pedirás tu propia comida en los restaurantes, pero hoy, la ordené por ti.
Algún día no temerás a la oscuridad, pero hoy, hice que todo estuviera bien con solo estar allí.
Algún día te romperás las rodillas y volverás a levantarte, pero hoy necesitas un beso y una curita.

Algún día aprenderás estrategias para sobrellevar tu ansiedad, pero hoy, te dejo dormir en mi cama.
Algún día irás solo a la escuela, pero hoy, me aseguré de que llevarte a salvo.
Algún día te mudarás por tu cuenta, pero hoy me quedé despierta hasta que llegaste a casa, sano y salvo bajo mi techo.
Algún día traerás a tu propio bebé a casa del hospital, pero hoy, me necesitas.
Y espero que todavía lo hagas, entonces. Porque estaré justo aquí. Si me necesitas.

 

Fuente: herviewfromhome.com