Cuando no toca irnos por largas horas del hogar nuestros perros y gatos nos esperan con ansias y es muy probable que muchos de ellos sientan ansiedad por separación.
Esto lo manifiestan de distintas formas, por ejemplo hay cambios en su comportamiento, tienen conductas destructivas, ladran constantemente o incluso tienen falta de apetito. Todas estas son señales de que el animal tiene algún tipo de trastorno que lo está afectando.
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El Médico Veterinario Patricio Moreno del Laboratorio Drag Pharma, cree afirmó que: “Algunas mascotas son más sensibles a estas ausencias y tienen a deprimirse, hay otras en cambio que se adaptan a la nueva rutina con facilidad”.
Cualquiera que sea el tipo de mascota, la ansiedad por separación afecta más a los perros y a los gatos, aunque como éstos son más solitarios pueden adaptarse mejor.
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Ansiedad por separación: cambios de comportamiento
Hay muchas formas de saber si nuestra mascota está sufriendo o pasando por un mal momento y la mejor forma de descubrirlo es gracias a cómo se comportan. Según Moreno “algunos perros pueden responder agresivamente, otros destruyendo, como por ejemplo mordiendo los zapatos o esparciendo la basura por toda la casa, cosas que antes no hacían, son formas comunes de hacer notar su ansiedad. Otra manera es vocalizando: muchas veces pasa que un perro que no ladraba cuando estaba con nosotros, pero ahora sienten un ruido y se vuelven locos y los vecinos empiezan a molestarse”. Ese tipo de comportamiento es muy habitual, al igual que cuando dejan de comer.
Pero eso no es lo peor de todo porque también pueden llegar a hacerse daño.
Las ansias que puede sentir un animal de la ansiedad por separación no es menor, en el caso de los perros se pueden auto mutilar (lamerse excesivamente una parte del cuerpo) como las extremidades y comienzan a perder pelo y crear heridas. Si este es el caso de tu perro, no desesperes porque para todos los problemas siempre existe alguna solución: dedicarles por lo menos una hora diaria con actividades recreativas juntos, como jugar o sacarlos a pasear.
Al prestarles atención, nuestro amigo de cuatro patas estará muy feliz y sabrá que llegarás con ánimos todos los días. Dejará de pensar que no volverás más y podrá adaptarse poco a poco, pero si eso no es suficiente siempre podrás recurrir a un veterinario para que le de un tratamiento adecuado: hay ansiolíticos naturales para tratar estados de ansiedad, estrés o depresión.
Si quieres que tu mascota mejore y deje de extrañarte, comienza a pasar más tiempo con ella y muestrale en detalle que nunca la dejarás sola. Preocúpate de enseñarle que estarás siempre a su lado y ¡espera ver cómo mejora!
