Estos días millones de hogares en EE.UU., están respetando el aislamiento social, quedándose en casa. Y yo lo he cumplido a cabalidad. Durante las pasadas semanas millones de hogares norteamericanos recibieron la invitación para participar en el censo nacional 2020. Ésta llegó por correo, por email (en el caso que lo hayas autorizado) o a una oficina postal. En mi caso, la recibí en mi casa: Una hoja plegable de color celeste que me solicita contestar el cuestionario online. Como no hay duda que me sobra un poco de tiempo y pensando en mí deber cívico (Aun cuando no soy ciudadana norteamericana) decidí responder. La idea es conocer cuántos somos, qué necesitamos…etc. Aquí todos cuentan.
La importancia de los datos del Censo del 2020 es que determinará la representación de tu estado en el Congreso, de qué manera serán distribuidos cientos de miles de millones de dólares en fondos federales cada año, y ofrecerá datos que afectarán a las comunidades durante la próxima década.
Y como buena residente, me interesa de sobremanera ser contada. No por convertirme en un número, sino más bien para que mi comunidad (y por ende a mí) se vea favorecida con nuevos consultorios médicos, centros comunitarios y otros beneficios.
La semana pasada recibí múltiple correos postales de parte de la Oficina del Censo. Los gringos son muy metódicos y siguen las fechas y reglas como dicta la ordenanza cívica. Estos correos incluyen en la invitación un número o código que permite identificar la casa y, por supuesto, responder las preguntas, que permitirán tener una visión general de cómo está mi zona.
Lo mejor es que está en varios idiomas, lo que me hizo sentir escuchada. Me encantó que la mía venía en castellano. Bueno, español como dicen acá.
La tarea fue sencilla: respondí el formulario con algunas preguntas sobre todas las personas que viven en mi hogar. Y la verdad es que me sentí segura, pues puedo confiar en que las respuestas son confidenciales y no se cruzaran con la información comercial, social o legal.
1 de abril: ¡Feliz Día del Censo! Para esta fecha, todos los hogares de EE.UU. habrán recibido la invitación para participar en el Censo del 2020. Recuerda: Una vez que ésta llegue, debes responder usando cualquiera de las siguientes tres opciones: por internet, por teléfono o por correo.
Una de las preguntas es ¿Cuántas personas viven o están quedándose en esta casa, apartamento o casa móvil al primero de abril del 2020? Recuerda que, como dice la oración, se trata de todos quienes habitan y duermen en tu hogar la mayor parte del tiempo. Debes incluir a los niños pequeños, compañeros de casa, amigos y familiares que viven contigo, aún cuando sea de manera temporal, ese primer día de abril.
¿Y Por qué nos hacen esta pregunta? Pues así, el censo podrá contar a todas las personas que viven en EE.UU. en esa fecha y garantizar, de esta manera, que nadie quede fuera.
Es reconfortante saber que mis respuestas ayudaran a mi ruta diaria al trabajo. Sí, porque además los resultados del censo influyen en la planificación y desarrollo de carreteras, así como en los subsidios para autobuses, metros y otros sistemas de transporte público. También las escuelas locales se verán beneficiadas ya que los datos determinarán cómo se distribuye el dinero para los subsidios que apoyan a los maestros y a la educación especial.
Es importante saber que la Oficina del Censo no envía correos electrónicos para pedir tu participación sin que lo hayas solicitado. Además, durante el proceso nunca te pedirán: tu número de Seguro Social, cuenta bancaria o tarjeta de crédito y menos aún dinero o donaciones.
Estás en casa, contesta el Censo y cuenta para que te cuenten!!
Lorna Collante. Puedes seguirla en su Instagram CollanteLorna
