Aun cuando la pandemia nos ha obligado a cambiar nuestras rutinas y nos ha mostrado lo necesario que es darnos tiempo para nosotros y nuestras parejas, el mundo sigue totalmente acelerado y con días diferentes, pero igual o tal vez más exigentes. Es así, como poco a poco vamos reduciendo los momentos en que podemos relajarnos y disfrutar con nuestra pareja. Pero una forma de hacerlo es cocinar juntos.
Ya la vieja tradición de que la mujer es la que tiene que cocinar quedó obsoleta y los hombres cada vez nos demuestran que son más hábiles para cocinar de lo que creemos. Nada más sexy que ver a tu pareja cocinando para ti con mucho amor.
Sin embargo ¿Qué pasa si los dos cocinamos juntos? La combinación entre los dos puede ser muy enriquecedora en cuanto al arte culinario, pero también lo es para potenciar una actividad para realizar juntos y compartir esos momentos los dos.
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Ojo, que no tiene que ser nada muy elaborado, ya que la idea es disfrutar el momento y no transformarlo en una discusión. Debes elegir un menú sencillo, pero que sea entretenido y que a ambos les guste, que permita que los dos se involucren en el proceso de elaboración.
Otro punto es preparar el momento. Vayan juntos a comprar los ingredientes. Que este momento sea completo para ambos. Preparen juntos la mesa y mientras están en la cocina, aprovechen de conversar y tomar un rico vino o una exquisita champaña.
Lo importante no es lo que cocinen no cuán profesional sea el plato que preparen. Lo relevante es que se den un espacio para compartir juntos, para conversar y para demostrarse todo lo que se quieren.
Después… Bueno, eso lo deciden ustedes ¿Cierto?
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