Hace algunas semanas, mi marido mandó un post contando que hace 9 meses decidimos tener relaciones sexuales todos los días, durante un año. Si bien fue aprobado con aplausos por los lectores masculinos, las mujeres que opinaban en este post ponían en duda su palabra, así como también decían que la mujer, de este hombre en cuestión (es decir yo), seguro no estaría tan contenta.
Debo señalar que nos casamos y decidimos emprender este desafío. Se nos ocurrió porque percibimos que nuestra frecuencia sexual era algo que nos dejaba contentos a ambos.
Suena absurdo, pero es que mientras más lo haces con el hombre que te gusta, más te dan ganas que se repita el tema. También es bueno acotar que antes de casarme, y con otros hombres, no me pasaba lo mismo, por lo tanto está clarísimo que el deseo sexual tiene estrecha relación con encontrar a alguien que te guste emocional y físicamente, no hay otra vuelta.
Parecía una locura, pensé que en algún momento me aburriría y le pediría dejar el desafío de tener relaciones sexuales todos los días. Sin embargo los resultados me sorprendieron:
– Mejora la relación de pareja: no importa lo que pase en el día, tienes un desafío que cumplir y sabes que ambos sintonizarán al volver a encontrarse después de un cansador día de trabajo.
– Mi autoestima ha mejorado: si bien no soy Kate Moss me siento mucho más regia que antes, debe ser que soy linda y atractiva si un chico me espera todos los días para acariciarme con las mismas ganas de siempre.
– Mi estado físico mejoró: siempre he sido sedentaria, sin embargo siento que mis piernas están más firmes y mi cuerpo más tonificado luego de cumplir con el desafío.
– Estoy más alegre: no es un mito, cuando tienes actividad que genera endorfinas en el cuerpo (y a diario!) todo parece más agradable y los problemas, pasajeros.
– Me siento más segura en la relación: compruebo a diario que le gusto a mi marido (y que me gusta a mí)
– Potencia la creatividad y te desinhibes: generalmente las mujeres tenemos algunas inseguridades asociadas a nuestro cuerpo o deseo. Bueno, cuando ya sabes que tu hombre conoce las reacciones de tu cuerpo y las formas imperfectas, entonces ya no hay de qué avergonzarte y disfrutas del sexo de manera más relajada, por lo mismo genera más satisfacción. De la misma manera tus ideas locas las irá conociendo y no le darán ganas de huir.
– Ayuda a la complicidad de la pareja: he aprendido a entenderlo mucho más. El tener relaciones sexuales tiene que ver mucho con sentir el cuerpo del otro, por lo mismo entenderse sin palabras. Pasa entonces que, en la calle o en reuniones familiares, él toma mi mano o me mira de determinada manera y sé lo que me quiere decir (distingo incomodidad, risa de burla, ironía, etc.)
– He tenido que volver a jugar: muchas veces jugamos a que nos conocemos recién o que soy la vecina saltando por el balcón directo a su cama (por favor evítalo si tienes una vecina sexy porque da rabia!).
– Si quieres copiar el desafío te recomiendo se lo propongas a tu hombre de manera creativa, no se rehusará (puede ser una cajita con un papel dentro que lo proponga, amarrado de un calzoncito sexy). Te amará por siempre.
– Ten siempre a mano lencería linda, cremas con olores dulces, mentitas y rasuradoras rápidas. No para satisfacerlo a él sino que para que te sientas linda tú, mientras más guapa te creas más buenas sensaciones sentirás.
Bueno, dejo en claro entonces que luego de proponerme tener relaciones sexuales con mi marido todos los días, he visto solamente beneficios. A las que no lo creían no soy una sometida, disfruto al igual que él y dejo de manifiestamente expuesto que para las mujeres el sexo es un tema importante y que felices en esa área nos mantenemos más bellas y sonrientes.
Esposa de Mr. Anónimo
Les dejamos el testimonio del marido pinchando acá.
Foto de: nuevaprensa.web.ve
