Dicen que la comunicación es la base de toda buena relación y claro, eso debe ser 100% cierto, salvo cuando tienes que comunicarle a tu pareja que no te gusta cómo hace ciertas cosas en la cama.
En cuestiones de sexo no hay bueno ni malo… Hay química y diferentes gustos, pero siempre será un tema sensible en el que no todos estamos abiertos a críticas.
Es muy difícil decirle a tu pareja que algo no te gusta sin lastimar su ego y sus sentimientos… Pero si tienes una relación estable y saludable con alguien y quieres invertir tu tiempo junto a su persona, necesitas solucionar eso.
No puedes pasar los próximos años de tu vida odiando cada vez que te pone la lengua en esa posición o cada vez que te toca de cierta forma.
Hay que tomar cartas en el asunto, pero hay que hacerlo con tacto y diplomacia, de la misma manera en que esperarías que lo hicieran contigo si quieren criticarte tus técnicas amorosas.
De entrada nada puede sonar a crítica porque cuando estás hablando de habilidades sexuales no existe eso de crítica constructiva (puede ser muy constructiva, pero todo lo que tu pareja escuchará es NO ME GUSTA).
Así que encontremos la manera de decirle a tu pareja que no te gusta ESO que hace en la cama:
Que él te guíe a ti
Para abrir el diálogo y decirle qué esperas que haga exactamente, invierte los papeles. Una noche dile: “hoy quiero que disfrutes como nunca, dime exactamente, paso por paso, qué quieres que haga”. Invítalo a jugar a que te guíe en algo que a él le guste, cualquier cosa, y luego cambia el papel. Busca que las direcciones sean lo más específicas posibles, para que tú puedas hacer lo mismo. Al final dile que es justo así como más te gusta y con suerte ya no le quedará duda.
Seducción al momento
El primer truco es intentar corregirlo en el momento en que está pasando, pero de forma muy sutil y coqueta. Por ejemplo, si lo que no te gusta es su técnica para el sexo oral, guíalo con palabras mientras lo hace. Emplea un tono muy coqueto para que parezca parte del juego y dile que vaya más lento o más rápido o lo que necesites para disfrutar más. Al final dale un beso lento y profundo y dile que fue la mejor vez de tu vida. Créeme que entenderá que así es como debe hacerse el asunto.
Una recompensa
Si después de aplicar el paso 1 en repetidas ocasiones tu pareja sigue sin captar la indirecta, puedes volverlo un premio. Dile: “¿recuerdas esa noche que moviste la lengua de tal y tal manera y que yo terminé muy rico? ¿Qué necesito hacer para que lo repitas?” (Tono coqueto y sexy).
Es hora de hablar
Si ninguna de estas 3 cosas funcionan para que tu pareja vea que así es como te gusta, entonces debes recurrir a las palabras serias y de frente. Hazlo en un ambiente íntimo, como cuando estén acostados o en la regadera. Puede ser después de una sesión de sexo, pero no lo hagas inmediatamente porque sentirá que no disfrutaste nada de lo que pasó. Deja pasar 1 hora y luego empieza hablando de ti. Tal vez tengas que recibir alguna crítica constructiva, pero esto mejorará sus relaciones a futuro. Abre el espacio diciendo que te gustaría saber en qué podrías mejorar para que él disfrute más y luego dile cómo necesitas que él haga las cosas para que ambos disfruten más. Si tomas la delantera y aceptas la crítica lo más probable es que él haga lo mismo con una buena actitud.
Al final esto les beneficia a ambos… Así que deja de sufrir y prepárate a mejorar al máximo tus relaciones sexuales.
¿Están listas para decirle a tu pareja cómo hacerlo más rico?
