El príncipe Harry ha admitido anteriormente a medios de comunicación que “añora tener niños” y ahora que se ha casado con Meghan Markle, más bebés reales podrían venir antes de lo que piensas. Pero los futuros hijos de la pareja no se convertirán necesariamente en príncipes o princesas.
Los recién casados se convirtieron recientemente en el Duque y la Duquesa de Sussex al decir “Sí, acepto” en la Capilla de San Jorge el 19 de mayo. La Reina tradicionalmente reparte nuevos títulos en los días de la boda, como el Príncipe Guillermo y Kate Middleton convirtiéndose en el Duque y la Duquesa de Cambridge, y esta no fue una excepción.
Sin la intervención de la monarca, Meghan Markle simplemente se habría convertido en Su Alteza Real, la Princesa Henry de Gales, no en ‘Harry’, sino en el estilo feminizado del nombre oficial de su marido. La concesión del ducado fue una bonificación de prestigio, incluso si ella no es la “Princesa Meghan”. Las princesas solo descienden de la sangre real, razón por la cual no es “Princesa Kate” o técnicamente ni siquiera “Princesa Diana”.
Incluso con sus títulos que suenan sofisticados, los futuros hijos de la pareja no recibirán el mismo tratamiento de acuerdo con la ley y la costumbre en este momento. Si Harry y Meghan decidieran que los nombres de sus hijos sean Andrew y Alice, por ejemplo, se llamarían Lord Andrew Mountbatten-Windsor y Lady Alice Mountbatten-Windsor.
La Reina intervino antes de que naciera la Princesa Charlotte para darle a ella, al Príncipe Louis y a todos los futuros hermanos los mismos títulos que el ‘Príncipe’ George. Por lo tanto, ella podría hacer lo mismo otra vez para honrar a su amado nieto Harry y su esposa Meghan.
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