Y miro mil veces los surcos de la pared queriéndote encontrar, con ese sentimiento de haber encontrado lo que siempre he buscado y haber perdido lo que siempre quise. Te saqué de mi vida como el aire en mis pulmones, sentía que si te retenía un minuto más podía morir.
Imperfecto y aun así, tentador. Odiado pero aun así sincero, tus defectos son cualidades en mis ojos. ¿Qué me tienes que hacer para olvidarte? Cómo olvidar a quien me enseñó la luz en mi noche más oscura, a quien me sacó de mis tinieblas para hacerme brillar nuevamente.
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¿Serás tal vez un agregado más a la lista de tristes recuerdos para esas noches donde me hace falta todo? Y todo lo quiero, donde te convertirás tal vez en el héroe de mis fantasías, pero no, eres un villano que estruja corazones, los sirve en su cama y una vez ahí los devora esperando al siguiente.
¿Qué puedo esperar de ti? Pues nada más, ya hiciste suficiente. Al tratar de morder mi corazón lo resucitaste y lo hiciste correr, pero corrió tan rápido que aun no lo alcanzo. Se fue, me quedó un vacío en el pecho que estoy rellenando con algunos dibujos y algunos sueños nuevos. Borré tu nombre, tus mensajes y tu facebook, para cuando vuelva mi corazón no se ilusione con ellos, no vea tus fotos, no se enamore de ellos.
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Por: Pitalandia
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