Esta historia es de aquellas que apretan el corazón porque un pequeño perrito que no tenía niguna oportunidad de sobrevivir, vivió un milagro siendo tan pequeño. Él fue abandonado detrás de un refugio de animales en Florida, Estados Unidos y no tenía muchas esperanzas de salir adelante.

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Fue justo en una noche de invierno cuando sus dueños no quisieron verlo más y no tuvieron problemas en abandonarlo. Si bien lo hicieron detrás de un refugio, nadie debería hacer pasar a un pequeño animal por algo así. Si alguiem se compromete a cuidar un animal en primera instancia, nunca debe dejarlo. Es un compromiso que bueno, no todos aceptan y si no hubiese sido por un policía el destino de este bebé sería otro.

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Todo comenzó detrás del refugio Panhandle Animal Welfare Society (PAWS) en Florida. El personal escuchó ladridos a las afueras del recinto y no dudaron en asomarse a ver. Cuando descubrieron que era un pequeño perrito ¡lo tomaron y le entregaron calor y comida!

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Estaban dispuestos a cuidarlo, hasta que el mismo día que fue ingresado al recinto, uno policía pasó por el lugar. Él fue a atender un caso que no estaba relacionado con este pequeño y cuando el oficial Marcus Montgomery puso su mirada en él, fue amor a primera vista.

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Sin pensarlo dos veces Montgomery tomó al pequeño en sus brazos y le prometió cuidarlo: lo adoptó inmediatamente. Además como ya contaba con experiencia en la adopción de mascotas (en casa tenía un pit bull llamado Vader), se lo llevó a vivir con él. Para no perder la costumbre de usar nombres relacionados con La guerra de las galaxias, el nuevo integrante de la familia fue bautizado como Kylo Ren.

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Ahora ambos son los mejores amigos y ¡es imposible no ver su cara de felicidad!

Por: Catalina Grez M.

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