La comunicación es clave en cualquier relación, y esto incluye la vida sexual. Hablar sobre tus deseos, límites y necesidades en la cama puede mejorar enormemente la experiencia para ti y tu pareja. Sin embargo, para muchas personas, comunicarse sobre sexo puede ser intimidante o incómodo. En este artículo, proporcionaremos consejos para ayudarte a comunicarte mejor en la cama y mejorar tu vida sexual.
Normaliza hablar sobre el sexo
Mientras te ocupas de tu parte, comienza la conexión sexual con tu pareja, simplemente hablando sobre el sexo. Para muchas personas, esta puede ser una conversación incómoda. Puede haber risas, vergüenza o incluso rechazo, especialmente si has estado en una relación comprometida a largo plazo que ha pasado por una sequía sexual. Pero no hay nada más importante para tu vida sexual que la comunicación.
Mantén el tono ligero, el amor y el tema fuera del dormitorio. No hables sobre el sexo justo después del acto cuando tus hormonas están por todas partes. Elige un momento y un lugar tranquilos. Habla con tu pareja sin ningún indicio de resentimiento, vergüenza o enojo.
Pregunta a tu pareja qué los excita
¿Cuál es la mejor manera de descubrir qué excita a tu pareja? Pregúntales. Sé directa o hazlo un juego. ¿Qué actos sexuales están dispuestos a probar? Si alguna de sus respuestas te sorprende, trata de expresar tu sorpresa como algo encantador en lugar de que parezca una crítica. Para puntos extra de sensualidad, mantén el contacto visual durante la sensual encuesta. Maldición, eso es confianza!.
Ahora que sabes lo que quieren, puedes poner esas preferencias en práctica. Haz a los demás lo que ellos quieren que les hagan a ellos. Esto es lo que llaman la Regla de Platino, que es mejor que la Regla de Oro. ¡Un amante generoso es un amante sensual!
Pon atención a las señales no verbales
Hay otras formas de aprender qué hace que tu pareja se retuerza de éxtasis. Simplemente, nota cuando se retuercen de éxtasis. ¡Oh, ese es el lugar!. Las señales no verbales pueden ser fáciles de perder, así que mantente lo más relajada y consciente posible cuando estés sin pantalones.
Incluso besarse te da un montón de señales no verbales. ¿Son mordedores? ¿Son chupadores de labios? ¿Son besadores suaves? Trabaja alrededor del cuerpo del otro y presta atención. ¿Cuándo se les enrojece la mejilla? ¿Qué estás haciendo exactamente cuando escuchas que su respiración se acorta? Recuerda, esas caderas no mienten.
Dile a tu pareja lo que te excita
Todo este dar es bueno, pero también quieres estar en el extremo receptor de este placer. Es importante recordar comunicar tus necesidades y deseos a tu pareja. La exploración masturbatoria que resulta útil, es como una especie de guía de usuario para lo que has descubierto sobre tu propio cuerpo.
Si las líneas de comunicación están abiertas, entonces es aún más fácil confiar en que tu pareja también quiere hacerte una prioridad. Los resentimientos pueden acumularse fácilmente si sientes que tus necesidades sexuales no están siendo satisfechas. Pero recuerda, tu pareja no es un lector de mentes.
¡Vamos, hablemos claro! Si queremos tener una vida sexual saludable y satisfactoria, la comunicación es el ingrediente secreto. No podemos esperar que nuestra pareja adivine lo que nos gusta o lo que no nos gusta en la cama. Tenemos que ser honestos y decir lo que pensamos y sentimos. Y recuerda, cada pareja es única. Lo que funciona para una puede no funcionar para otra. Así que, experimentemos juntos, hablemos sobre nuestros deseos, necesidades y límites, y descubramos qué nos hace sentir bien y qué no. Al final del día, la comunicación abierta y honesta nos llevará a una experiencia sexual más placentera y satisfactoria.
