You are currently viewing La deliciosa experiencia con la chocolaterapia

Al entrar en Mint Wellness Center sentí que me transportaba a otra dimensión. Una donde el tiempo se detenía y podía dejar afuera las preocupaciones del día a día. El olor y el decorado me transportaron a otras latitudes. Me acordé de la película “Midnight in Paris” de Woddy Allen, ambientada en la Ciudad de las Luces a comienzos del siglo XX, aquí todo se trataba del disfrute y el arte. Cada rincón de este centro está milimétricamente diseñado para crear ese ambiente que permite olvidar el trabajo, la familia y el estrés diario. Una de las metas que buscábamos con mi amiga Lorna cuando decidimos venir a probar la terapia de chocolate que aquí ofrecen.

Al llegar nos recibieron con un té de frutas disecadas del Ecuador, una tibia puerta de entrada para lo que nos esperaba. Claro que para relajarnos había que estar seguras de que el Centro contaba con todo tipo de cuidados y limpieza que se exigen en esta época de coronavirus. La explicación nos dejó más que satisfechas, pues por el solo hecho de ser un lugar que trata pacientes en sus post-operatorio comprendimos que las medidas de cuidado y aseo estaban al nivel de un hospital o similar.

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Una vez con este punto zanjado, Paula Christiansen, fundadora de Mint Wellness Center nos contó los beneficios de su terapia de chocolate 100% orgánica

  • Mejora la circulación
  • Aporta a la piel taninos, teobromina y polifenoles, antioxidantes totalmente naturales que combaten el envejecimiento de la piel.
  • Nutre la piel desde el exterior, gracias a su contenido en oligoelementos que remineralizan el metabolismo.
  • Ayuda a combatir la celulitis.
  • Retrasa el envejecimiento porque estimula el procesamiento natural del colágeno y fortalece las fibras elásticas que mantienen la piel y los músculos tensos.

Muy entusiasmadas después de escuchar todo esto, entramos en la habitación y nos ubicamos en camillas vecinas. Estábamos listas para nuestra experiencia. La que comenzó con una exfoliación de todo el cuerpo y cuya finalidad es deshacerse de toda impureza y dermis muerta que teníamos. Paula nos explicó que la idea es limpiar la piel para asegurarse que el tratamiento suerte el mejor efecto.

Una vez retirado los trocitos del exfoliante con una toalla, estábamos listas para el chocolate. Como un lienzo listas para recibir la primera mano de pintura. Y lo divertido es que así me sentí a medida que la esteticista, con un pincel, me embetunaba con cacaco 100 por ciento orgánico ecuatoriano. Un producto no recomendado para consumir dado su fuerte sabor amargo. (sí, obvio que lo probé). Una vez bien cubiertas del producto nos envolvieron con dos capas de papel. Así como las que usas en la cocina: el de plástico transparente y el metálico. No sé si parecíamos panqueques o burritos listos para el horno y ahí nos quedamos por 15 minutos. Aunque Lorna se quedó dormida, yo no fui capaz de relajarme hasta ese punto, pero disfrute cada segundo a mi manera.

La sensación fue extraña, pero relajante y lo mejor fueron los resultados posteriores: una piel tersa, más humectada y menos celulitis. Sí, a los tres días de la experiencia mi marido me mira y me dice: te ha bajado la celulitis. “Bravo”, pensé yo. “¿Habrá sido el chocolate? ¿Con una sola sesión?” Creo que nunca lo sabré. De lo que sí estoy segura es que mi cuerpo está más suave y el rato que pasamos es para repetirlo.

¿Quién no ha soñado alguna vez con estar cubierto de chocolate? Pues yo cumplí esa fantasía infantil la semana pasada.

Joanna Wurmann, Directora Mujer y Punto.

Mint Wellness Center
349 Miracle Mile
Coral Gables, Florida 33134, USA
+1 786-328-5914
[email protected]
@mint_wellness_center