La importancia de tener una lactancia prolongada
Hay muchas mamás que se sienten presionadas con tener que dejar de amamantar a pesar de querer seguir debido a la presión social. La lactancia prolongada es muy cuestionada por la sociedad; debido a que en ocasiones no encontramos argumentos con los cuales defenderlo. Una opción es quedarnos calladas y seguir haciendo lo que pensamos que es correcto y la segunda opción es entregar argumentos validos a los demás de por qué es beneficioso continuar con la lactancia pasado el primer año. A través de la segunda opción podremos generar más impacto sobre nuestra sociedad y se podrán generar cambios. Mientras existan más personas informadas acerca de los beneficios de la lactancia prolongada, menos cuestionadas no sentiremos por los demás. No debemos olvidar lo que nos plantea Laura Gutman de que nuestra forma de vincularnos con nuestros hijos es íntima y debemos por ende protegerla.
Acá les señalaré algunos argumentos acerca de los beneficios de una lactancia prolongada.
La lactancia materna contribuye en lo siguiente:
– Está comprobado es que la lactancia materna entrega defensas y alimentación mientras esta dure.
– “En la leche de las madres que han amamantado a sus hijos por más de 1 año se ha visto un aumento significativo en los contenidos de grasa y energía, en comparación con las que han amamantado por periodos más cortos”. Mandel 2005
– “La leche materna sigue aportando nutrientes claves más allá del primer año de vida, especialmente proteínas, grasas y la mayoría de las vitaminas.” Dewey 2001
– La leche materna de una madre cuya guagua tenga entre 12 meses a 23 meses contiene las siguientes propiedades en 448 ml: Dewey 2001
29% energía
43% proteina
36% calcio
75% vitamina A
76% folato (ácido folico)
94% vitamina B12
60% vitamina C
– Las investigaciones han demostrado que existe relación entre el rendimiento académico y la lactancia materna, los niños con lactancias prolongadas obtienen mayor puntaje en las pruebas de CI.
– La academia Americana de pediatría recomienda que “la lactancia materna debería ser continuada por lo menos durante el primer año de vida y más allá de este mientras la mama y el niño quieran. Alargar la lactancia entrega beneficios de salud y desarrollo tanto para la madre como para su hijo. No hay un tiempo máximo de duración y tampoco hay evidencia de daño psicológico en el desarrollo si se amamanta al tercer año de vida o más.” (AAP 2012, AAP 2005)
– “La leche materna contiene nutrientes, anticuerpos y sustancias inmunes que no están presentes en las fórmulas que simulan la leche materna o en la leche de vaca. Mientras más tiempo amamantes, menos riesgo hay de tener cáncer al pecho, cáncer ovárico, diabetes, hipertension, obesidad y ataque al corazón. (ABM 2012)
María Elena Bascur C.
Psicóloga infantil
Consejera en Lactancia Materna
