A fines del año pasado tuve la oportunidad de entrevistar al Chef José Mendín, quien me invitó a conocer y degustar los platos de Pubbelly Aventura, y me enamoré del lugar. La comida es fuera de serie ¿y el postre? mejor ni mencionarlo, es fuera de este mundo. En esa conversación me comentó que una de sus comidas favoritas era la de su país, Puerto Rico y que por eso había decidido abrir un nuevo local con esta comida en Miami.
Pues en esta ocasión, el Chef me invitó a probar “La Placita”, su nuevo proyecto. Para mí ésta era la primera vez que probaba comida puertorriqueña. La verdad, es que no tenía la menor idea que esperar. Tenía claro, eso sí, que iba a haber varios tipos de platos con plátano, ya que es una constante entre los países caribeños. Pero fuera de eso no sabía con qué me encontraría y decidí no investigar. Como a estas alturas ya conozco el trabajo del Mendín opté por dejar que me sorprendiera, y no me equivoqué. Como siempre sus creaciones son originales, atrevidas y muy bien realizadas.
Mi almuerzo comenzó con dos de los tragos de la casa: El Guava-té Mule, (USD12) una variante de la Mula de Moscú, una bebida que incluye Vodka, guayaba, cilantro y té y un MaMs-Yak (USD14), éste es una mezcla de Don Q Cristal, piña, maracuyá, limón verde y amargo. Ambos bastante interesantes y de mi gusto, aun cuando no tomo nunca. Que quede claro que sólo los probé y con todo y eso llegue a mi casa directo a la siesta.
Este Chef, semifinalista del Premio James Beard en cinco ocasiones como “Best Chef, Southeast“ me dio a probar una verdadera muestra de comida de Puerto Rico, con esa originalidad que le caracteriza. Empezamos con Tostones de plátano (USD5), que me sorprendió porque venían acompañados de salsa mil islas (al parecer los Boricuas la usan con todo). Luego probé una especie de palitos de maíz crujientes por fuera, pero suaves y mantecosos por dentro, conocidos como Sorullitos de Maiz (USD8). Me encantaron podría haber comido miles, pero como ya conozco estas degustaciones decidí dejar espacio para lo que venía.
Y por suerte lo hice, porque nuestra mesera, nos sirvió Croquetas de fricasé de Pollo (USD6); Ensalada de avocado y Alcapurrias con Ropa Vieja (USD12). Esta última es una masa frita rellenas con un guiso de carne con verduras. Y para terminar probé el famoso Trifongo con Relleno (USD15), ésta es una base hecha de una mezcla de plátanos verde y dulce y Yuca. Se sentía como un pancito un poco dulce, pero nada secos (como los tostones), y venía relleno con pollo guisado, de todo mi gusto.
Como ya no podía comer más, me trajeron los postres. Sí, los postres. Uno no puede comer más y los chefs creen que aún te queda espacio. Bueno, como comenté al principio Pubbelly tiene, lo que yo considero, uno de los mejores dulces del mundo, así es que había que ver la competencia Puertorriqueña. El primero fue el Tembleque (USD6), un postre típico de navidad en base a coco, ron, piña y limón verde. Y luego apareció mi tan esperado deseo: la versión boricua de Mendín del Bread Pudding (USD10). En este caso, él lo hace de Chocolate con plátanos, toffee, pecanas y helado encima. Bien bueno, la verdad!!
Para quienes deseen probar la comida Puertorriqueña este es un buen lugar para empezar. Como dije el Chef José Mendín se caracteriza por su calidad, originalidad y perfecta ejecución de los platos. Aun cuando sus restaurantes no son baratos, en “La Placita” existe un menú muy interesante y recomendable ya que está a muy buen precio (USD15). El almuerzo Boricua incluye una ensalada de la casa, una base y un relleno. Además de sándwiches que van entre los USD14 y los USD16, entre muchas otras cosas.
“La Placita” toma su nombre de “La Plaza del Mercado de Santurce” en San Juan, Puerto Rico. Ésta una plaza donde puedes encontrar las más coloridas frutas, vegetales, hierbas y productos locales. Además en sus alrededores hay varios bares, fondas y restaurantes que de jueves a domingo se llenan de gente, convirtiéndose en una bulliciosa y alegre fiesta de barrio.
El restaurante ha generado una gran controversia entre los locales. Su fachada es un inmenso mural con la bandera de Puerto Rico, algo que al parecer a algunos vecinos no les ha gustado. Pero como siempre hay gente negativa, también hay muchos positivos, y “La Placita” ha recibido el apoyo de más de setenta mil locales que piden que la pintura se mantenga.
Joanna Wurmann
Corresponsal Mujer y Punto Miami
