¡Quemar 600 calorías en 40 minutos! , Imposible, pienso al oír a una joven a mi lado en el gimnasio. Entre medio sale la palabra “spinning”. Uf, he estado frente a esa sala varias veces, un profesor que más bien hace pensar que él es el verdadero estímulo de la clase es lo único que ha llamado mi atención. Esto de andar en bicicleta sin avanzar, y peor aún sin un sillín definitivamente no es lo mío. Ahora…si me dicen que podría quemar un trozo de torta o pizza en una clase, podría evaluarlo.
Lo llaman el “ejercicio aeróbico por excelencia”, y aunque su mayor popularidad fue hace un par de décadas, sus enormes beneficios hacen que siga dando que hablar. Ahora comprendo por qué mi doctor se sonrió cuando le dije orgullosa que hacia 45 minutos de caminadora ultra rápida mega e inclinada, pero no bajaba un gramo. “Anda a hacer spinning mejor”, fue su respuesta.
Sin embargo, cuándo averiguas más sobre esta promesa de un cuerpo atlético y marcado verás que hay opiniones encontradas. Por un lado, es cuestionada por algunos profesionales que temen por las lesiones que puedes sufrir en su práctica. Por otro lado, expertos aseguran que la clave está en hacerlo correctamente, y sobre todo instruirse bien.
Si eres constante, además de tonificar y mejorar la flexibilidad de las partes inferiores de tu cuerpo, tu mente lo agradecerá, ya que mejora la calidad del sueño y es uno de los ejercicios más útiles para superar el estrés o la ansiedad. (Vamos bien, me estoy entusiasmando)
También beneficiará tu corazón, aunque para ello ten en cuenta que las clases deben ser de intensidades diferentes, y que tienes que hacerte un chequeo médico antes de comenzar esta disciplina deportiva para evitar problemas. La práctica constante del spinning, como otros ejercicios aeróbicos, mejora la ventilación pulmonar. (Eso de constante me hizo un poco de ruido, honestamente suelo ser de las que se matricula en septiembre desesperada porque viene el verano, y no tiene cómo tapar el flotador)
Contrario a lo que muchos piensan, varios especialistas opinan que este tipo de entrenamiento tiene muy poco impacto sobre las articulaciones, porque te permite distribuir el peso del cuerpo en forma balanceada, así evitas presionar las zonas más delicadas como rodillas, coxis, tobillos y, caderas.
El spinning o bicicleta bajo techo, como todos los deportes tiene una “técnica” que debes seguir rigurosamente para evitar lesiones. El ajuste inadecuado de la bicicleta y la mala postura son algunas de las causas más comunes de lesiones, y por eso es tan importante una correcta instrucción a la hora de practicarlo. Debes pedirle a tu entrenador que en la primera clase te ayude a regular la bicicleta y te indique la postura adecuada. (No se a ustedes pero esa parte me encantó)
¿Quiénes no pueden practicarlo? Adultos mayores con problemas de corazón, presión alta o que tengan conflictos de equilibrio o lesiones preexistentes en la parte baja del cuerpo. El riesgo de infarto, que muchos han difundido, es mínimo, pero antes de comenzar a practicarlo debes hacerte un ecocardiograma para descartar una patología. También las personas con problemas a la columna o que toman medicamentos deben controlarse por cualquier riesgo de contraindicación. Muchas veces cuando haces ejercicio te das cuenta de problemas cardiovasculares entre otros, pero claramente no hacerlo puede provocarte muchos más.
Bueno, creo que me he convencido y asistiré a una clase de prueba. Veremos cómo me va. Y ¿ustedes se animan? ¿Son de las fanáticas que soportan estas exigentes clases?
Por Claudia Ansita A.
Foto de fitaffinitynews.com/
