Es importante proponerse metas asequibles, graduales y que sean coherentes con nuestros propósitos de vida y con las responsabilidades de cada día. A continuación, algunos consejos para no perder la automotivación durante el desafío de concretarlos:
- Defina con claridad los objetivos que desea conseguir.
- Escríbalos en un papel.
- Fije fechas de cumplimiento, si es necesario, organizándolo en etapas y con plazos. Mucha gente no lo hace por miedo a fracasar y a no cumplirlo, lo que alarga aún más el proceso. Ir cumpliendo las fechas resulta la mejor motivación para salir adelante.
- Analice con detenimiento qué es lo que ha impedido hasta ahora que consiga sus objetivos. Piense en posibles soluciones para eliminar esos obstáculos.
- Identifique los conocimientos, habilidades e información que necesita para conseguir lo que quiere. Prepárese, estudie, capacítese, si es necesario.
- Piense en las personas y organizaciones que pueden ayudarlo. Contáctese con ellos y solicite su ayuda.
- Elabore un plan de acción por escrito, bien detallado.
- Actúe: póngase en marcha y no se cuestione demasiadas cosas, simplemente responda a su plan.
- Visualice mentalmente sus objetivos regularmente.
- Asuma el compromiso de que nunca se rendirá, de que alcanzará sus metas.
Fuente: Revista Buena Salud (texto editado para Mujer y Punto)