Uno de los conflictos más comunes entre las parejas en esta época navideña es precisamente la Navidad, es decir, la mera cena del 24. Y es que muchas veces (si no es que en la mayoría de los casos) hay de dos sopas: o no te cae bien la familia de tu esposo, novio, pareja, etc; o eres muy apegada a tu familia y no quieres dejar de ir a estas fechas tan importantes.

Cuando estamos solteras (o tienes una relación informal o de poco tiempo) te vas a tu casa y listo, pero si estás casada o tu noviazgo se volvió muy serio, ahí la cosa cambia, porque así como tú te mueres de ganas de ver a tu familia y estar con ellos estos días, lo más seguro es que tu pareja esté experimentando el mismo deseo.

Para llegar a un acuerdo en el que ambos tengan una verdadera Feliz Navidad, la psicoterapeuta Paty Villa te da estas recomendaciones:

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Hablar

“No se esperen hasta pleno 24 de diciembre en la tarde para hablar del tema, es comprensible que muchas veces lo evadamos porque no sabemos si la relación ya está como habar de algo tan serio y formal; sin embargo, si ya llevan seis meses o más, es importante que ya lo aborden para evitar posibles conflictos a futuro”.

Negociación asertiva

Lo primero es ser empático: pensar qué es indispensable en su familia y qué en la tuya. Posteriormente lo mejor es llegar a un acuerdo, o como dice Paty Villa, una negociación asertiva: “Se trata de llegar a un acuerdo en el que tú das y yo doy, pero sin consecuencias, como decir ‘ok, voy pero pongo cara en toda la cena’. Si vas a ceder, cedes bien o mejor no cedas”, recomienda Paty.

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No abusar en la negociación

Aquí Paty recomienda no dejar de ver que el otro necesita tiempo con su familia así como tú lo necesitas con la tuya. Es decir, el trato debe ser justo “Si optan por pasar una fecha con la familia de uno, y otra con el de otro, no se debe abusar de los tiempos, por ejemplo que tú vayas a la cena de Navidad con su familia, pero que para Año Nuevo él se tenga que ir una semana a Acapulco con tu familia.”, dice nuestra experta.

Si no quieres ir a su casa

Si de verdad no quieres ir a su casa por alguna razón en específico como, por ejemplo, que su tío te vea de una forma grosera en la cena, díselo a tu pareja. Hablando se entiende la gente y seguramente él entenderá que te sientes incómoda por esa razón, y que no tiene nada que ver con él. Ahora que si te dice que estás “alucinando”, puedes llegar al acuerdo de ir, y en el momento que su tío te vea así, coméntaselo a tu pareja para que se dé cuenta de la situación.

Nunca te calles las cosas porque a la larga eso perjudica más a las relaciones.

Plan B

Paty recomiendo mucho tener un plan B: ni en tu casa ni en la mía. “Hay muchas parejas que prefieren no ir a la casa de ninguno y mejor irse juntos de vacaciones y pasar esa época ellos solos. Nada está mal ni bien, lo importante es llegar a un punto de acuerdo con tu pareja.”

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Fuente: EsMas.com