¿Te ha pasado? Creo que probablemente todas hemos querido morder a alguien porque sentimos tanto amor que llega a darte nervio. Esta actitud fue estudiada por la Universidad de Yale la cual determinó que se trata de algo normal y se llama “agresión tierna”. Para la sorpresa de muchas,  morder tiene un fin social: ayudarnos a controlar nuestras emociones.

La investigadora Oriana Aragón dice esta actitud, que nos hace recordar a Suarez y su mordisco en el mundial, se explica porque “a veces expresamos nuestros sentimientos de formas inesperadas, que a simple vista mostrarían todo lo contrario a lo que sentimos, y eso, aparentemente nos ayuda a guardar el balance emocional interior”.

De esta manera, lo que ocurre es que no puedes contener las emociones que una persona produce en ti y es literalmente “imposible soportarlo”. Es común que a veces pase con la pareja pero también es típico con niños y bebes. Uno los ama tanto que dan ganas de apretarlos y morderlos.

La revista Psychological Science publica que muchos seres humanos expresamos nuestras emociones de una manera que es, aparentemente, incorrecta ante hechos que son decisivos en nuestra vida, por eso es muy probable que te den ganas de apretar o morder a alguien por quien tengas mucho afecto.

Para Aragón, en el estudio se da a entender que “la gente se expresa de esa manera para intentar recuperar un equilibrio en sus emociones.Suelen producirse ante situaciones que les sobrepasan de manera positiva, y actuar así les ayuda a volver a la normalidad emocional de manera más rápida”.

¿Te ha pasado? ¿Andas por la vida con esta agresión tierna o no?