El pasado sábado 19 de Mayo, tuvo lugar la Boda Real entre el Príncipe Harry y Meghan Markle. Donde personas de todo el mundo se detuvieron para poder ver toda la ceremonia en vivo y directo a través de diversos medios.
Desde entonces la boda ha sido tema en todas las plataformas ¿y cómo no? si hay tanto de que hablar! Una de las cosas que más causaron asombro fue el destino que tuvieron todas las flores utilizadas en la gran boda.
Las flores elaboradas que decoraban la Capilla de San Jorge para Meghan y la boda real del Príncipe Harry en 2018 han encontrado un segundo hogar muy conmovedor en St. Joseph’s Hospice en Londres. El hospital anunció que recibió una “entrega muy especial” de algunas floraciones de fama mundial el domingo.
“Muchísimas gracias a Harry, Meghan y la florista Philippa Craddock“, escribió St. Joseph’s en una publicación de agradecimiento en Facebook. “Nuestro hospicio huele y se ve precioso. Es un gesto tan encantador “.
Según la BBC, una de las pacientes tenía una conexión especial con el evento principal. Pauline Clayton, de 89 años, dijo que trabajó para Norman Hartnell cuando era adolescente para ayudar a bordar el vestido de boda de la reina Elizabeth II Botticelli.
¡Impresionante gesto!
Además de esto, el ramo que llevó Meghan Markle, lo dejó sobre la tumba del guerrero desconocido en la Abadía de Westminster, siguiendo la tradición real.
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