You are currently viewing 8 señales de que estás en una relación codependiente

Uno de principales signos de la codependencia es cuando los propósitos de alguien giran en torno a las necesidades de su pareja. Esto puede hacer que se sientan atrapados, no valorados y busquen la aprobación de la otra persona para sentirse completos. Las investigaciones demuestran que depender de los demás puede sabotear tu éxito.

Es importante prestar atención ya que si no se ha detectado, puede crear daños a largo plazo y evitar que la relación crezca saludablemente. La codependencia es una forma de adicción, la causa de una adicción o el resultado de una adicción hacia otra persona. En general, la codependencia es usada para caracterizar una condición que se origina en familias disfuncionales, donde los niños compensan la ausencia de los padres y desarrollan una excesiva sensibilidad por las necesidades de otros.

Los adultos codependientes empiezan como niños que crecieron rápidamente cuando los padres no podían cuidar de ellos. Ahora como adultos, repiten el mismo patrón negativo de intentar cuidar de otro a costa de ellos mismos.

Puede que nunca hayas considerado que estás en una relación codependiente, pero si alguna de estas 8 señales se encuentra presente en tu relación, puede hacerte despertar de golpe. Hay ciertos pasos que puedes tomar para acabar con la codependencia, pero el primer paso es reconocerla.

  1. Piensas que puedes hacer que tu pareja cambie

Aunque no has podido conseguir con éxito que tu pareja cambie en el pasado, sigues intentado. Sientes cierta certeza de que podrías ser feliz, solo si te escuchara. Las personas en una relación codependiente intentan corregir el comportamiento negativo del otro en lugar de cambiar sus propios hábitos destructivos.

Los investigadores que estudiaron este tipo de relaciones, encontraron que ese sentimiento de culpa, baja autoestima y el hecho de ser como un padre/madre para tus propios padres a una temprana edad, están relacionados a una relación adulta codependiente. Se cree que la terapia que ayuda a sanar la autoestima puede ayudar a las personas a recuperarse de una relación codependiente.

  1. Dices “Sí” cuando en realidad quieres decir “No” y luego te sientes culpable

Aceptar las exigencias de tu pareja en un intento de “hacerlo feliz” no es productivo y daña tu integridad personal. Presta atención a tus propias necesidades primero y asegúrate de que están siendo cubiertas primero.

Para romper el ciclo de una relación codependiente, necesitarás aprender a cumplir tus propias necesidades sin la ayuda de tu pareja.

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  1. Tienes mucho amor para dar, pero tu pareja parece que lo rechaza

“Darlo todo hasta que duela” es tu lema cuando estás en una relación codependiente. Le das a tu pareja todo tu amor y apoyo, lo ayudas con sus problemas financieros y emocionales, pero simplemente él cree que no lo ayudas en nada a pesar de tu amor.

  1. El estado de ánimo de tu pareja afecta tu propio estado de ánimo

Eres muy sensible acerca del estado de ánimo de tu pareja y sus necesidades. Pero, ¿Qué hay de ti? No puedes cambiar cómo se siente tu pareja, pero puedes cambiar tu propio estado emocional y cómo respondes a su estado de ánimo negativo.

  1. Raramente haces algo lejos de tu pareja

¿Es porque no confías en lo que él hará lejos de ti o porque él controla todas sus salidas? En una relación codependiente, una o ambas partes de la relación buscan controlar el comportamiento de la otra persona. Esto no es nada saludable.

  1. Te preocupa que tu pareja te deje

Sentirte insegura de tu relación es normal en una relación codependiente, pero no es normal en una relación saludable. Tu pareja se enoja todo el tiempo contigo porque le pides constantemente que cambie y estás frustrada por su falta de cambio, pero estás determinada a seguir intentando.

Sin embargo, también te preocupa que rechace tu ayuda y esto aumenta ese patrón negativo.

  1. Tienes pensamientos sobre dejar a tu pareja

La vida sería mucho más fácil con alguien que escuchara tu feedback o al menos que no ande enojado todo el tiempo. Aunque estos pensamientos pasan por tu cabeza, no estás dispuesta a hacer algo para dejar a tu pareja. Esta es la naturaleza de una relación codependiente.

  1. El comportamiento de tu pareja es abusivo

¿Sientes temor de tu pareja? ¿Sientes que sospecha de las actividades que realizas cuando no estás con él? ¿Te acusa de cosas que no has hecho o te dice qué puedes y no puedes hacer? ¿Limitan tu amistad con los demás? ¿Abusa del alcohol o drogas, o tiene otros comportamientos abusivos?

Los hijos de padres alcohólicos son más propensos a terminar en una relación codependiente. Queriendo ayudar a un adicto o a cualquiera que tenga comportamientos destructivos, protegiéndolos de sí mismos, es una señal de que estás en este tipo de relación.

A veces, puede haber diversos problemas que hagan difícil terminar una relación codependiente. Hablar con un terapeuta puede ayudarte a afrontar estos problemas en un ambiente positivo.

Por: Edith Gómez
Editora – gananci.com
Twitter: @edigomben