Ya se acaba enero y eso implica que se acerca el 14 de febrero. ¿Por esas cosas de la vida estarás en Miami en esa fecha? ¿Ya tienes planes para festejar el día de los enamorados? Pues bien, déjame recomendarte Sugar Factory para tu celebración. Éste es, sin duda, uno de los restaurantes más seductores de esta ciudad. En un principio, yo lo había catalogado como un lugar más para niños, pero el otro día me invitaron a degustar su menú de San Valentín y debo de decir que salimos muy impresionados. Y créanme, mi pareja no es fácil de emocionar cuando de comida se trata.
Pueden concluir de lo anterior que ésta no es mi primera visita a Sugar Factory, pero en esta ocasión la finalidad era probar la propuesta para esa noche romántica. Para empezar nos trajeron Mac & Cheese Pops (USD16), que como podrán imaginar son bolitas fritas de macarrones con queso, con una salsa de tomate y albahaca de acompañamiento. A mi novio no le gustaron (pero ya les dije que él es un poco complicado…con la comida). Yo, por mi parte, aunque tampoco soy fanática, ni de la fritura ni de este típico plato gringo, éstos me parecieron sabrosos, con poco sabor a aceite y creo que el adobo les otorga un toque de frescura muy agradable.
Aprovechando, que era el día invernal, que Miami tiene cada año, probamos el Tomato Bisque (USD10). Éste venía junto a una tostada con queso y ajo. La idea acá es bien sencilla: el pan puedes cortarlo y sumergirlo en la sopa (que fue lo que yo hice) o te lo comes por separado para completar el plato. La consistencia de la preparación era más bien cremosa y, en vez de todos los condimentos que normalmente lleva este plato, en éste había pequeños trocitos de parmesano. Estos, sin duda, le agregan un toque de sorpresa a la degustación.
Otra de las opciones de entradas que trae el menú para San Valentín es la Ensalada Cesar (USD16). Con una porción muy generosa, ésta puede ser un plato para compartir o, al agregarle alguna proteína; el principal. Nuevamente la cantidad de queso era abundante y los crutones estaban adobados con albahaca. Estaba muy apetitosa y, a pesar de toda la comida que teníamos en la mesa, nos la comimos completa.( Aunque mi novio comió más que yo)
Los platos fuertes, fueron un tema aparte. Y aquí es donde más me sorprendió Sugar. Con un menú tan grande y con preparaciones tan complejas no esperaba gran cosa de los platos más “adultos”. (para entender mejor lean mi artículo anterior Sugar Factory en Miami) Pues bien de segundo nos ofrecieron a elegir entre Pan Roasted Ora King Salmon” (USD35), el Black Angus Filet(USD48), el Brick Chicken o una Pasta con tomate y espárragos al estilo Alfredo. Nosotros elegimos los dos primeros, ambos muy bien ejecutados, por cierto, pero hubo dos cosas dignas de destacar. En el salmón, mi novio, no quería que le pusieran tocino y no hubo ningún problema. La salsa la prepararon en el momento y a su gusto!!! No sé qué tamaño de cocina tendrán, pero para realizar todo esa carta en el minuto, ésta debe ser inmensa y contar con mucho personal. Y por el otro lado, mis ochos onzas de carne estaban exactamente al punto que lo pedí: media cruda y blandita.
Cuento aparte son los tragos y milkshakes de este lugar. Éstos, sin duda, son, en gran parte, responsables del éxito de este restaurante. Si no desean comer todo lo mencionado anteriormente, ir sólo por algo dulce también vale la pena. En esta ocasión nos dieron a probar dos de los Goblets (USD43) que ellos ofrecen. El primero fue el “Diamond Rosé” creado especialmente para esta noche romántica y que consta de, además de vino, con Vodka de frambuesa, Schnapps de damasco y soda de limón. Para mi estaba un poco dulce, pero los anillos comestibles junto con el de juguete, más los ositos de goma que trae, sin duda, lo hacen perfecto para esta celebración. (Éste lo puedes incluir en el menú por USD14 más)
Y el broche de oro de la noche, sin duda, fue el batido Hearts of Love, hecho con una taza de ganache de chocolate rojo oscuro decorado con corazones de cacao negro y frutillas en rodajas. Coronando la preparación un bombón de Krispy Rice (USD19) y fresas. Realmente la creatividad y ejecución es única y, sin duda, dejará contenta a la más exigente de las parejas.
Con un menú inmenso, que incluye una cantidad impresionante de complejos tragos, jugos, platos y postre, nunca pensé que podrían servir comida tan buena. Comprenderán que con una oferta tan amplia y tan elaborada, no es fácil entregar productos de calidad. Y la nuestra de esa noche estaba impecable. Además, la creatividad del lugar dejó a mi novio con la boca abierta. Sin duda vale la pena probar Sugar Factory en tu viaje a Miami.
Con todo lo anterior, no les quepa duda que tendrán un 14 de febrero dulce y sensual. La cena completa (que incluye un fondue de chocolate, que no quisimos probar) cuesta USD65 por personal y si deseas agregarle la gigante copa de Rosé el precio es de USD89.
Joanna Wurmann, Una romántica corresponsal en Miami para Mujer y Punto.
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Sugar Factory Miami
1144 Ocean Dr, Miami Beach, FL 33139
