You are currently viewing Violencia de género en las redes sociales, una forma invisible de acoso

Si bien antes se asociaba la violencia de género hacia la mujer solo con el maltrato físico, hoy podemos encontrar un marco mucho más grande de instancias donde se puede generar acosos, malos tratos y menoscabo.  En la actualidad, las redes sociales se han convertido en una nueva forma de generar un tipo de violencia muy fuerte, sobre todo entre las adolescentes.

Distintos casos de violencia de género en Internet

Han sido numerosos los casos que hemos visto en el último tiempo que dan cuenta de este tipo de violencia. Uno de los que más impacto causó fue el de una joven en Río de Janeiro que fue drogada, y posteriormente violada por 30 hombres. No bastando con eso, subieron el video a las redes sociales un video con 40 segundos del ataque y unas fotos que se viralizaron a través de las redes sociales.

Este uno de los muchos casos que se han presentado donde el acoso, hostigamiento y humillación sexual se han masificado a través de las redes sociales, o los servicios de mensajería, violando la privacidad de las personas y poniendo a las mujeres en el centro, nuevamente, del tema de la violencia de género.

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Sin embargo, uno de los puntos más terribles de todo este comportamiento, es la naturalidad con que se toma el tema. La gente no tiene reparos en ver las fotos, compartir los videos y reír con lo que está sucediendo. Cabe recordar los videos de “Wena Naty” (2007) y de “Fifi” (2015) donde, además de viralizar el contenido, se juzgó y critico el comportamiento de las niñas y no a los que difundieron el video.

Redes sociales e Internet

María Francisca Valenzuela, Presidenta de OCAC Chile (Observatorio contra el acoso callejero Chile), sostiene que “cuando se trata de difusión de contenidos violentos en redes, específicamente que tienen que ver con tratos vejatorios a mujeres, adolescentes y niñas, es importante comprender que no se tratan de situaciones aisladas y que tal como otras dimensiones de violencia, forman parte del continuo de violencia de género. Las redes sociales u otras plataformas de Internet, son simplemente otras de las dimensiones en las cuales podemos encontrar este tipo de agresiones”.

Y no es solo que esto se de en nuestro país, o en Latinoamérica. El mundo entero está siendo parte de este nuevo tipo de agresiones. Los casos más conocidos son el de las famosas, quiénes por el solo hecho de publicar sus fotos en las redes sociales quedan expuestas y  sus imágenes y videos son distribuidos de manera casi brutal. Sobre todo aquellas que son de conceptos más íntimos.

Las redes sociales por su parte, intentan resguardar la seguridad de sus usuarios incentivando a que las personas bloqueen o reporten conductas o contenidos que les parezcan inapropiados. Pero lo que pasa en otros sistemas de mensajería, como Whatsapp por ejemplo, es que no existe ningún tipo de control en la difusión de este tipo de contenidos.

Educación y autocuidado

Uno de los temas claves para luchar contra este tipo de situaciones es la educación y el fomento del auto cuidado en los más jóvenes. si bien, no podemos evitar que estén hiperconectados, lo que podemos hacer es entregar las herramientas necesarias para que ellos vayan siendo capaces de discriminar los contenidos y no caer en este tipo de situaciones.

Patricia Peña, profesora del Instituto de Comunicaciones e Imagen de la Universidad de Chile (ICEI) y parte del directorio de Girls in Tech, opina que “en Chile y América Latina, tenemos como principal desafío la educación y el fomentar estrategias de auto cuidado. Falta abrir y potenciar aún más las conversaciones de este tema con niñas y niños, con adolescentes y jóvenes, ya que ellas y ellos viven sus interacciones digitales (el uso cotidiano de la web, y sus recursos y espacios) como un continuo, donde no hay diferencia entre la vida online – offline”.

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El tema es tarea de todos. No debemos normalizar este tipo de comportamientos. Menos reírnos y juzgar. Si te ves enfrentada a una situación como esta, debes denunciar. Alcemos la voz para que la violencia de género hacia la mujer realmente sea condenada por toda la sociedad y no solo por nosotras. Criemos a nuestros hijos de manera tal que las nuevas generaciones vengan con otro tipo de mentalidad.

Rompamos con los prejuicios, seamos respetuosas y responsables con nuestros actos. No olvidemos que la principal fuente de información de nuestros hijos somos nosotras.