La nueva película de Netflix con Kristin Davis (Sex & the City), Vacaciones en África, se estrenó durante el fin de semana y es una delicia de ver. Se centra en una mujer, Kate, cuyo esposo la deja justo antes de su segunda luna de miel en Zambia. Sin embargo, armada de valor, decide realizar el viaje sola. Como es de esperar en toda comedia romántica (RomCom), ella conoce a Derek (Rob Lowe) y los dos pasan los siguientes 90 minutos salvando elefantes y coqueteando.
Y aun cuando dije que es una RomCom, el romance no es siempre el centro de la película. La mayoría de los 90 minutos podrás disfrutar de bellos paisajes y te enamorarás de la hermosura de los elefantes. ¿Sabías que estos animales tienen sentido de humor y que son muy cariñosos? Yo, que no soy muy fanática de lo salvaje ni de los safaris, quedé fascinada con todo lo que aprendí con la cinta. Aunque suene ridículo, me sorprendió lo “humano” de estos gigantes cuadrúpedos. ( no sé si es un cumplido, pero entienden a lo que me refiero)
Sin duda la trama central, la conservación del elefante, no es ajena a la actriz de Sex and the City. En una conversación con la revista Glamour, Davis contó que “Los productores y los escritores vinieron a mí y me dijeron que querían hacer algo diferente a la típica película navideña. Ellos habían estado siguiendo mis redes sociales y habían visto todas mis publicaciones sobre mi trabajo con los elefantes… una cosa llevó a la otra y cuatro años después aquí estamos con esta película.”
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Demorarse cuatro años en hacer una cinta es bastante, pero la actriz explicó a Glamour “esta película fue muy difícil de producir de manera adecuada y ética. Era realmente importante para mí, ya que estábamos haciendo una película sobre conservación, rendir homenaje a las personas que hacen esto todos los días y arriesgan sus vidas para proteger a los elefantes, rinocerontes y a todos los demás animales que están en peligro. Además no sólo usamos elefantes entrenados como lo hace la industria del entretenimiento. Así que tuvimos que encontrar lugares que, realmente, rescataran elefantes y nos permitieran filmar allí.”
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Davis pasó dos semanas en cada lugar de filmación para que los elefantes pudieran acostumbrarse a escuchar su voz y olerla, convirtiéndola en un elemento más de su hábitat. Las escenas con los grandes animales fueron filmadas en una reserva privada llamada Camp Jabulani, cerca de Kruger. Otras se realizaron en Zandspruit Bush, Aero Estate y Lilayi .
Esta es una película ideal para verla con niños y/o en un fin de semana tranquilo. Ya que al menos saldrás con una sonrisa en la boca.
